El Design Thinking es la metodología capaz de poner al usuario en el centro de nuestra reflexión. Se cree que sólo desde esta perspectiva es posible encontrar soluciones realmente relevantes para las personas. Se focaliza principalmente en la innovación social, es decir por un modelo de innovación que impacte en el ser humano aportándole un beneficio integral y social al individuo y su ecosistema.
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La metodología Design Thinking suele constar de 5 fases (Empatizar, definir, idear, prototipar, testear), aunque el número de fases y las herramientas que se utilizan en cada una de ellas puede variar, ya que es una metodología que se adapta a las diferentes temáticas de cada proyecto y sus problemas a solucionar.
> Empatizar: Se trata de ponerse en el lugar del otro.
> Definir: Establecer cuál es el problema con el que se trabajara.
> Idear: Imaginar posibles soluciones
> Prototipar: Hacer fisícas las ideas
> Testear: Comprobar, validar la solución o iterar en el proceso.
